...los presiento a mi lado,
camine junto a ellos en un pasado cercano,
recorrimos valles y montañas,
mares y rios helados,
bebimos cristales de agua y comimos frutos amargos,
a veces nos deteniamos para mirar a los pajaros,
hablar con las flores o asombrarnos con un mago.
Recorrimos muchos caminos
dejando huellas que precedian nuestro paso...
Pero hubo un dia
como en los cuentos olvidados,
que vi alejarse a mis amigos saltando sobre los lagos,
que como espejos gigantes
reflejaban su andar alado.
Me quede solo,
rodeado de tiempo y pasado,
escuche risas... y vi junto a mi
un pequeño fantasma azulado,
que reia y reia
mientras un reloj sin agujas
lloraba desesperado...
Carlos Alberto
diciembre 22 - 2009
martes, 22 de diciembre de 2009
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Por fin puedo visitarte...este poema està hermoso, espero sigamos en contacto.
ResponderEliminarsaludos cordiales y un abrazo especial de Navidad